22 de diciembre de 2005

FASCISMO A LA CATALANA

Lo que está sucediendo en Cataluña rebasa los peores augurios. El Gobierno tripartito está llevando tomando medidas que colman lo imaginable en un Estado de Derecho. TORQUEMADA ha regresado y se ha construido una masia.

El Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC) aprobó el pasado lunes, 19 de diciembre, un acuerdo en relación con “determinados contenidos” emitidos por la cadena COPE. El acuerdo constata que la COPE ha “incurrido en una vulneración de los límites constitucionales al ejercicio legítimo de los derechos fundamentales a la libertad de información y de expresión.” http://www.audiovisualcat.net/actuaciones/pr21-12-05-cast.html. Eso sí, el Conseller BARGALLÓ le ha restado importancia al asunto. Ha dicho que la rápida actuación contra la COPE:“Es como las tarjetas de los futbolistas, se acumulan y puede haber sanciones”. ¿Se referirá a la cámara de gas?.

El CAC –léase ERC-PSC-IC- se erige en garante de la libertad de expresión. Sus inspectores políticos se arrogan la facultad de definir los límites de la libertad de expresión e información. Son los guardianes de los derechos proclamados en la Constitución Española. Tal hecho resulta un tanto paradójico cuando se trata de los mismos que hace escasas fechas “celebraban” el aniversario de la Carta Magna, arrancando páginas de la Constitución.

Con la aprobación de la nueva Ley Audiovisual Catalana los políticos catalanes, y no los Tribunales de Justicia, serán quienes decidan qué se puede y qué se debe acallar. Sus facultades llegan a tal límite que incluso pueden clausurar una cadena de radio. Como lo oyen. ¡El fascio se quita la careta sin pudor alguno!

Así las cosas no es de extrañar que la citada Ley haya sido tildada de “franquista” por el Presidente de la Asociación de la Prensa –González Urbaneja-. Es más, hasta el diario “EL PAIS” ha mostrado su rechazo frontal a la misma señalando, entre otras cosas, que “El camino emprendido por el Parlamento catalán al dotar de tan amplias capacidades al CAC es extremadamente preocupante y peligroso”. http://www.elpais.es/articulo/elpporopi

Lo de Esquerra no puede sorprender a nadie, pero que el adalid de las libertades -el PSOE en su vertiente catalana –PSC-, haya apoyado esta Ley, deja al descubierto su verdaderos ideales. ¿Fascistas, quién dijo fascistas?. Yo no. No soy como ellos ni quiero serlo. Quiero que la SER siga emitiendo; que “Mundo Obrero” plasme negro sobre blanco lo que le venga en gana y que “El PAIS” siga siendo un diario de referencia. No escucho la COPE ni me gusta JIMÉNEZ LOSANTOS. La cuestión es otra y se llama pluralismo. ¡Se llama democracia!

Finito de Aldeatejada –A la sazón novillero-